Uno de los principales obstáculos de las personas para reinventarse es creer que ya no tienen edad. Y aunque su cuerpo les pide a gritos un cambio de carrera, entran en modo pánico tan solo de pensarlo.
“Que quién me va a contratar”, “cómo voy a empezar de cero”, “van a decir que a dónde voy” o “no sé qué podría hacer”…
Mil y una excusas que su cerebro les pone para protegerlas y que no se expongan fuera de esa zona de confort donde todo es aparentemente incierto.
Anhelan pasión pero creen que tal vez su tren ya pasó y no queda más remedio que resignarse hasta la jubilación haciendo eso.
Hoy vengo a contarte que esto no es así con 3 claves para que descubras que no hay edad y cómo puedes darle la vuelta a tu miedo.