Tú vales un montón, aunque hoy parezca que no es así.
Es lógico que sientas que te has apagado. Estás a disgusto en el trabajo, te quemas y te apagas. Esa luz de ilusión que antes tenías ha dejado de brillar. Y es que además todos lo notan.
A mí me pasó y durante un tiempo mi autovaloración profesional y autoestima iban en decremento. Pensaba que en realidad no valía.
Hoy te cuento lo que necesitas entender y solucionar para que vuelvas a sentir tu brillo.